Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

II Samuel 3, 32-35

32 Sepultaron a Abner en Hebrón. El rey alzó su voz y lloró junto al
sepulcro de Abner, y también lloró todo el pueblo.

33 El rey entonó esta elegía por Abner: «¿Como muere un necio había
de morir Abner?

34 No ligadas tus manos ni puestos en cadenas tus pies. Has caído
como quien cae ante malhechores.» Y arreció el pueblo en su llanto por él.

35 Fue todo el pueblo y, siendo aún de día, rogaban a David que
comiese, pero David juró: «Esto me haga Dios y esto me añada, si pruebo el
pan o cualquiera otra cosa antes de ponerse el sol.»